Jesús salió del templo y, cuando ya se iba, se acercaron sus discípulos para mostrarle los edificios del templo.
Respondiendo él, les dijo:
¿Veis todo esto? De cierto os digo que no quedará aquí piedra sobre piedra que no sea derribada.
Mateo 24 (Mc 13.1-2; Lc 21.5-6)