La Cámara de Delegados de Virginia se prepara para votar sobre un proyecto de ley que protege a los empleados de las empresas o agencias del gobierno de intentar implantar microchips en sus cuerpos, un acto que muchos republicanos de la Cámara comparan a la labor del Anticristo.
El republicano Mark Cole, patrocinador del proyecto, dice que el ímpetu detrás de legislar la propuesta se centrada en las libertades civiles y la privacidad, pero añadió que cree que los implantes de microchip podrían muy bien ser la “marca de la bestia“, como se menciona en el Apocalipsis.
Lo preocupante aquí es el trasfondo religioso, más que el implante que igual es poco atractivo si no tiene fines médicos. Cole admite que no es experto religioso, pero advirtió que hay una profecía en la Biblia que habla de esta marca.