Lourdes Martinez dijo:
Estoy de acuerdo con McFarland
"Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica." (1 Corintios 10:23). Si el Templo ha sido separado para que cristianos tengan la oportunidad de reunirse con otros cristianos para adorar a Dios y compartir su palabra, no debe ser usado en ninguna otra forma. Serìa como traer imágenes de otros dioses a la casa de Dios, lo cual es abominaciòn a Dios.
Aùn cuando esas personas cristianas no se encuentren presentes cuando los musulmanes celebran sus servicios, Dios si ve lo que ellos hacen y a quièn està dirigida su adoraciòn y estoy segura que no le place. No se puede comprometer la Palabra con el fin de ganar almas para Cristo. Como dice McFarland, existen muchas otras formas de llevar el mensaje de amor y salvaciòn de Jesucristo a las vidas que aùn no le conocen sin necesidad de contristar al Espìritu Santo.
Dios les bendiga.