
Estos se reunieron con los ancianos y, después de ponerse de acuerdo, dieron mucho dinero a los soldados, diciéndoles: «Decid vosotros: "Sus discípulos llegaron de noche y lo hurtaron mientras nosotros estábamos dormidos".
Y si esto lo oye el gobernador, nosotros lo persuadiremos y os pondremos a salvo».
Ellos tomaron el dinero e hicieron como se les había instruido. Este dicho se ha divulgado entre los judíos hasta el día de hoy.
Mateo:11,15