Rebelion. La paranoia de la gripe A

Es inadmisible que Gobiernos, Administraciones, empresas y sindicatos (entre los que se encuentran UGT, CC.OO, ANPE o Sindicato Profesional de Justicia por ejemplo) estén entrando en la dinámica de recomendaciones sin tener certeza de sus propuestas. La actitud de colectivos y grupos de amedrentar a la población evitando el contacto físico, saludos, etc. es tremendamente demencial y paranoico. Mucho más razonable es la actitud preventiva de algunos facultativos, que no ven sentido vacunar a toda la población, cuando apenas se vacuna el 40% contra la gripe común, mucho más peligrosa y mortífera.

Curiosamente el Gobierno y los Ministerios de Sanidad y Defensa, tenían comprado 10 millones de tratamientos de principio activo antiviral desde el 2006, cuando aún no se conocía la gripe porcina y al conocer ésta decidieron comprar 5,4 millones adicionales.

Sin embargo, ahora viene la segunda y peor parte: efectos secundarios del oseltamivir (Tamiflú). Este medicamento puede producir secuelas psicológicas y psiquiátricas, convulsiones, delirios… En 2007, Japón prohibió su utilización por producir 14 muertos.

La campaña de vacunaciones en 2009 en los seis primeros meses se presentaron demandas por parálisis por valor de 1,3 billones de dólares. La justicia culpó a la vacuna de 25 muertos.

La British Medical Journal, revista especializada que ya alertó de efectos secundarios de otra polémica vacuna, la del papiloma humano contra el cáncer de útero ha vuelto a advertir de efectos secundarios del oseltamivir (Tamiflú) y zanamivir (Ralenza), así como la revista Eurosurveillance que alertan de náuseas, vómitos, efectos neuropsiquiátricos, falta de concentración, insomnio, etc.

Son numerosos los expertos que desaconsejan la utilización de Tamiflú en niños.